martes, 4 de junio de 2013

LEYENDAS DEL BASKET DEL REAL MADRID (3): LUYK, EL GANCHO DE ORO DEL BASKET FIBA


Aunque nacido en Siracusa en 1941, para todos los aficionados españoles y madridistas en particular, Clifford Luyk "nacio" el 25 de noviembre de 1962, pues en esa fecha jugó su primer partido oficial en España y con El Real Madrid. Pedro Ferrándiz -¡cómo no!- se lo trajo de Estados Unidos en uno de sus numerosos viajes a esa tierra, explicando el fortuito fichaje de esta manera: "Aún no habíamos ganado la Copa de Europa... así que me fui en busca de dos buenos jugadores... Fuimos a la Universidad de Yale con el Boston Celtics, que iba a jugar un partido amistoso contra los Knicks de Nueva York. En el descanso del encuentro vi salir a un muchacho pálido, débil, ojeroso y sin gran estampa, que tiraba a canasta desde una esquina y las metía casi todas... En veinticuatro horas formalicé todo y me lo traje".

Con el fichaje de Luyk, el Real Madrid de baloncesto iniciaba su etapa más gloriosa, equivalente a las cinco Copas de Europa de fútbol, ya que en cinco años se proclamó 4 veces Campeón de Europa (1964, 65, 67 y 68, jugando la final del 69), arrebatándole el trono y el poder al entonces imbatible e inaccesible gigante ruso del TSKA de Moscú, convirtiéndose en el dominador del viejo continente. Formó un tándem casi imparable con Bob Burgess (Copas de Europa 64 y 65), con Miles Aiken (Copas de Europa 67 y 68) y Rafael Rullán (Copas de Europa 74 y 78). Sus títulos, números y galardones, tras 16 temporadas en el Real Madrid -desde la 62-63 a la 77-78-, son irrepetibles e inigualables:
-Ligas de España: 14.
-Copas de España: 10.
-Copas de Europa: 6 y 4 veces finalista.
-Copas Intercontinentales: 3.
-Máximo anotador de la Liga en la temporada 67-68.

Respecto a la selección de España, Luyk debutó en abril de 1966 (Mundial de Chile), donde fue segundo máximo anotador del campeonato. Su llegada supuso un salto de calidad muy grande para el baloncesto nacional, pues con él comenzamos a luchar por los puestos de las medallas, algo impensable antes de su venida. Sus 203 centímetros fueron la referencia del combinado español durante muchos años, permitiendo hacer frente a las torres de los equipos rivales, hasta entonces inabordables. En los 10 años que vistió la camiseta española (1966-76), fue internacional en 150 partidos oficiales, anotando más de 2.000 puntos. Nominado en la Selección ideal de los Juegos Olímpicos de Méjico-68, su momento estelar llegó con la medalla de plata en el Eurobasket de Barcelona-73, el premio a toda una trayectoria descomunal. Nunca nuestro potencial hubiera llegado a tanto de no contar con Luyk.

Ayudante de Lolo Sáinz durante 6 temporadas, asumió el primer banquillo blanco en 1991-92, consiguiendo (en tres temporadas) 2 Ligas, una Recopa de Europa y una Copa de España, siendo elegido mejor entrenador de la temporada 1992-93.

Elegante y eficaz en su juego, gran defensor y anotador, carácter y temperamento a raudales, liderazgo único, con un gancho majestuoso y letal, Luyk era el jugador en el que se podía confiar siempre y nunca defraudaba, nunca fallaba. Nacionalizado español en 1965, ha expresado en mil ocasiones, de forma clara y extensa, el porqué de sentirse español. Ha repetido que se trata, antes que nada, de un proceso humano y nada más. Al retirarse en 1978, dijo: "Todo, absolutamente todo, se lo debo al baloncesto". Gratitud del deportista para su deporte. Gratitud del aficionado para el legendario Cliffor Luyk y su mítico gancho que, casi en paso de ballet, tan imperecederos recuerdos tiene de él.


José Quijada Rubira.

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